La batalla de Guadalajara, 2004

Los manifestantes de Guadalajara lucharon por el pueblo

¡Libertad inmediata para los presos políticos!

Torturaron sistemáticamente a docenas de personas en Guadalajara al cumplir la consigna del gobernador, Francisco Ramírez Acuña, de que "Habrá mano dura contra los detenidos". Fue un operativo preparado de antemano contra las protestas por la cumbre Unión Europea-América Latina, con la finalidad de amedrentar al movimiento contra la globalización imperialista. Las clases dominantes están intensificando sus ataques al pueblo y temen que las masas salgan del control: de ahí su necesidad de golpear a las protestas populares para tratar de controlar y suprimirlas.

Detuvieron a gran parte de la gente en redadas después de las protestas. Apresaron a la gente por el simple hecho de ser joven, o por su manera de vestir. Un poeta, un vendedor de libros, dos jóvenes saliendo de su escuela y varias otras personas denuncian que fueron detenidos aunque ni tuvieron nada que ver con las protestas. Los más de cien detenidos fueron golpeados repetidamente en los testículos, cabeza y todas partes del cuerpo. Fueron mantenidos incomunicados por 48 horas y no les dieron ni comida ni una gota de agua. Muchos fueron obligados por tortura y amenazas a firmar "confesiones". Las mujeres fueron blanco de un trato particularmente ultrajante: fueron obligadas a desnudarse y hacer sentadillas mientras los guardias amenazaron con violarlas, hay un informe de una mujer que fue violada y una fotógrafa fue golpeada tan salvajemente en la cabeza que estuvo en un estado crítico, así que la desaparecieron durante varios días.

A pesar de que estos ultrajes fueron registrados hasta por la oficialista Comisión Estatal de Derechos Humanos de Jalisco, el gobernador con todo cinismo premió con dinero a los policías torturadores y la administración de Fox ha defendido en todo momento su actuar. Ahora 45 detenidos enfrentan ridículos cargos de pandillerismo, resistencia o desobediencia, motín, lesiones, robo, daños y ataques a las vías de comunicación. Los principales medios de comunicación, que no son más que lambiscones de grandes capitalistas como Azcárraga y Salinas Pliego y toda su clase, han puesto el grito en el cielo acerca de la "violencia" de los manifestantes mientras callan las torturas que han sido bien documentadas en unos cuantos medios.

Muchos de los detenidos no estuvieron en los valientes combates contra la policía, pero ¿cuál fue el gran crimen de los que sí les hicieron frente? Quisieron parar una cumbre de muerte y explotación. A la cumbre asistió el gobierno de Gran Bretaña que, junto con Estados Unidos, están imponiendo la colonización de Irak por medio de masacres y tortura. También asistieron otros imperialistas europeos que ya han votado dos veces en la ONU su aprobación a esta colonización de Irak. En esta cumbre bloquearon la condena a EU por las torturas en Irak y el bloqueo de Cuba, e incluso que se pidiera la democratización de la ONU. Los gobernantes de América Latina, fieles lacayos de los imperialistas, obedecieron sumisamente.

¿Y a que vinieron estos imperialistas europeos con sus manos cubiertas de sangre? A ensanchar su tajada de la explotación de las clases trabajadoras de América Latina. Estos imperialistas, junto con los imperialistas de Estados Unidos y Japón, nos roban más de 6 mil millones de dólares al año en ganancias repatriadas de sus inversiones directas y más de 10 mil millones de dólares al año en los intereses de la deuda externa, por no hablar de los miles de millones que se entregan a la banca extranjera por Ipab-Fobaproa, los intereses de la deuda interna, etc. Se llevan los frutos de nuestro trabajo y nos dejan en la pobreza, pero nunca están satisfechos, siempre exigen más. Y ahí están los grandes capitalistas y terratenientes, lacayos de los imperialistas, con Fox a la cabeza, prometiéndoles lo que quieran: venderles la luz y el petróleo, imponer una nueva Ley Federal del Trabajo a su medida, cobrarles menos impuestos a los ricos y aumentárselos a los pobres con el IVA, etc. Con razón Fox negó en el contexto de otra cumbre que fuera lacayo, aunque no se había lanzado públicamente esta acusación: es que es tan obvio que lo es. Su sumisión a los dictados de Washington es tan patente que las "decisiones" del gobierno mexicano más de una vez las ha anunciado primero la Casa Blanca. No tienen inconveniente en dar la bienvenida a extranjeros cuando son criminales de guerra e imperialistas que nos tienen subyugados como semicolonia, pero expulsan a 8 manifestantes de otros países por unirse a la lucha popular en Guadalajara contra los que oprimen al pueblo en todo el mundo.

El pueblo nunca ha estado de acuerdo con esta rapaz explotación, siempre ha luchado, y siempre ha recibido la misma respuesta de las clases dominantes: las matanzas de Tlatelolco en 1968 y del 10 de junio de 1971, horrendos crímenes cometidos por Luis Echeverría y otros que siguen siendo protegidos por el Estado; las masacres de Acteal, el Bosque, el Charco, por las que nunca se hizo justicia; el asesinato de Digna Ochoa y ahora del estudiante Noel Pável González, crímenes impunes encubiertos por el Estado; el terror reaccionario contra las mujeres en Ciudad Juárez, donde los violadores asesinos siguen siendo protegidos por las autoridades. Mantienen su sistema de explotación con la represión contra la protesta popular, y su policía, que todos conocemos como la policía de la mordida y el tehuacanazo, siempre está para reprimir al pueblo, en Guadalajara y en todas partes.

Guadalajara fue una cumbre de los imperialistas y sus lacayos que no dudan en matar y torturar al pueblo en aras de aumentar sus cochinas ganancias sacadas de nuestro trabajo, sudor y sangre. Fue completamente justo luchar contra esta cumbre de muerte y explotación. Los manifestantes de Guadalajara lucharon valientemente en los intereses del pueblo.

Las clases dominantes ven como los movimientos contra la globalización y la guerra imperialistas han crecido y les temen porque desenmascaran y combaten su sistema de explotación y muerte. Reprimieron brutalmente en Cancún en 2001, pero no lograron detener al movimiento, que ha crecido desde entonces. Ahora buscan condenar a muchos años de cárcel a jóvenes cuyo único delito es buscar un mundo mejor para el pueblo. Buscan callar las protestas del pueblo. Tenemos que rebatir su ofensiva: por medio de la denuncia, la movilización y la defensa legal, hay que luchar por la liberación de los 45 presos. ¡Libertad inmediata para los presos políticos!

Si vamos a combatir con éxito a los verdugos del pueblo, tenemos que oponernos a sus intentos de dividir a nuestras filas. Las autoridades siempre tratan de echar la culpa de su represión a sus víctimas, pero es preocupante que algunas voces dentro del propio movimiento contra la globalización hayan dicho públicamente que los jóvenes que enfrentaron a la policía son responsables de la represión. Esta represión fue planeada de antemano, como esta misma gente ha señalado: la policía sin provocación alguna arremetió con garrotes y rifles lanzagases contra los manifestantes el día anterior al enfrentamiento y la policía ya justificaba desde antes de la cumbre su represión diciendo que no habría concesiones "para los vándalos". Ya que la represión fue planeada de antemano, ¿cómo puede ser culpa de los manifestantes combativos? No lo fue, y repetir las mentiras de las autoridades en este sentido, independientemente de las intenciones de uno, sólo sirve para escindir al movimiento, que es lo que quieren las clases dominantes. Por otra parte, tampoco pueden ignorarse las valiosas aportaciones de los manifestantes que no quisieron enfrentarse con la policía: todas las formas de lucha y protesta contra las cumbres imperialistas contribuyen a desenmascararlas y elevar la conciencia del pueblo. Es bueno que haya mucho debate en el movimiento entre distintas ideas y propuestas; es malo si dejamos que el enemigo nos divida. Hay que luchar por la unidad de todos los que se oponen a la globalización, la dominación y la guerra imperialistas, y no caer en las trampas que nos tienden las clases dominantes para tratar de dividir el movimiento.

Nuestro gran odio por los crímenes en Guadalajara, hay que transformarlo en lucha por liberar a los presos, y también hay que transformarlo en lucha revolucionaria por tumbar a los opresores del pueblo. Las protestas en las cumbres son de gran valor para desenmascarar al enemigo, elevar la conciencia y combatividad del pueblo y expresar el repudio popular. También es necesario ver cómo ponerle fin a la dominación y las guerras imperialistas. Para liberar al pueblo de la dominación de los imperialistas, grandes capitalistas y terratenientes, hay que ir a la raíz del problema y confiscar la propiedad de estas tres clases explotadoras y ponerla al servicio del pueblo: la solución es la revolución proletaria. Se dice que eso ya es cosa del pasado, pero en realidad comienza la nueva ola de revoluciones proletarias del siglo 21. Por ejemplo, en Nepal las masas populares están librando una guerra popular con la dirección del Partido Comunista de Nepal (Maoísta), participante en el Movimiento Revolucionario Internacionalista (MRI). Esta guerra de las masas contra el rey feudal, respaldado por armas y asesores del imperialismo yanqui y británico, ya ha liberado el 80% del país: está construyendo bases de apoyo en el campo donde se elimina el reaccionario sistema de castas, se le da la tierra a quien la trabaja, se combate la opresión de la mujer, se gana a los hombres a participar en los quehaceres de la casa y se establecen regiones autónomas de las minorías nacionales, entre muchas otras transformaciones de esta revolución de nueva democracia que abre paso a la revolución socialista. En Nepal se está demostrando en los hechos que hay una alternativa real a la globalización y dominación imperialista, como también lo están demostrando otras luchas armadas del pueblo dirigidas por comunistas maoístas en el Perú, las Filipinas, India y Turquía. En México hace falta aprender de estas experiencias y forjar un partido comunista marxista-leninista-maoísta unido en el MRI y capaz de encabezar la lucha revolucionaria del pueblo por su liberación. ¡Mirar hacia Nepal, un mundo mejor comienza a nacer!

Compañeros: el enemigo nos reprime para tratar de amedrentarnos por el temor que le tiene a la protesta popular contra su sistema de muerte y explotación. Unámonos todos en la lucha por liberar a los presos políticos de Guadalajara.

¡Libertad inmediata para los presos políticos de Guadalajara!

¡Es justo rebelarse contra los imperialistas y sus lacayos!

¡Abajo la dominación y la guerra imperialista!

¡Mirar hacia Nepal, un mundo mejor comienza a nacer!

Movimiento Popular Revolucionario


Continúa...