Desde las calles de la ciudad de Oaxaca hasta las brechas de las sierras y valles de las siete regiones del estado, la gente ultrajada se ha puesto de pie.
La ira acumulada durante décadas de injusticias y desesperación por fin estalló en una revuelta popular que se extiende y se profundiza ante la criminal represión de las fuerzas del orden y exige que se vaya el gobernador Ulises Ruiz Ortiz. "¡Qué Horror! ¡Hay que parar esto!" dicen los grupos del Poder oficial y los grandes empresarios y terratenientes a quienes representan. "¡Qué bueno! ¡Hay que defenderlo!" dice la gente también harta en otras partes del país y más allá de nuestras fronteras. Frente a la cruel realidad que vive la gran mayoría a manos del sistema económico y político que impera en todas partes, la lucha independiente y decidida de los cientos de miles en Oaxaca que se han confluido en la APPO (Asamblea Popular del Pueblo de Oaxaca) nos inspira y nos enseña. ¡Defendamos y fortalezcamos esta lucha y el camino que representa de resistencia popular independiente!
LA HUELGA SE VUELVE REVUELTA POPULAR
Hace más de tres meses, el magisterio oaxaqueño salió en huelga pidiendo aumento salarial, rezonificación por vida cara, y otras demandas sociales. Desde el comienzo, el gobierno desató una campaña de injurias, intentando azuzar a la población en su contra. El 14 de junio, vino la primera brutal represión. Por más de 4 horas atacaron 2000 policías con el fin de desalojar a los maestros del Centro Histórico. Les lanzaron cientos de bombas de gas lacrimógeno y, desde un helicóptero, bombas de gas pimienta. Les golpearon con toletes, les dispararon con armas de fuego y les lanzaron sus perros de ataque. Frente a todo este "arsenal", los maestros combatieron valientemente con palos y piedras. Cuando fueron dispersados, se reagruparon y poco después vinieron estudiantes de la UABJO y diferentes organizaciones sociales en su ayuda. Lograron repeler a los policías que salieron corriendo y los maestros volvieron a retomar el zócalo. El operativo fue planeado por Ulises Ruiz y avalado por el Congreso del Estado (mayoría priísta, pero con panistas y perredistas también). Y fracasó. Fue repudiado contundentemente por organizaciones populares, sindicales, de colonos, campesinas, indígenas y estudiantes de la UABJO, que después se unieron en la APPO. Ya no sólo maestros, sino también campesinos, obreros, estudiantes, médicos, abogados, artistas y amas de casa se han unido a la batalla, y parte de los comerciantes, pequeños empresarios y sacerdotes apoyan la destitución del gobernador. Así la huelga magisterial se convirtió en una lucha política del pueblo en general que centra en quitar al gobernador.
SE DESAFIA EL VIEJO PODER
Mientras Ruiz invoca el "estado de derecho" para atrincherarse en el poder, manda la policía, porros encapuchados y paramilitares para disparar a la gente, destruir transmisoras de radio y televisión, y asesinar, detener, torturar y desaparecer a la gente. Hasta ahora, han asesinado a por lo menos 5 personas: 3 en la zona Triqui y 2 en la ciudad, (un mecánico, esposo de una profesora, y un arquitecto empleado del gobierno que participaba en el movimiento). Hay varios heridos, detenidos, torturados y algunos desaparecidos. Se ve que este estado, su "derecho" y su "justicia", son para suprimir a la gente y defender a los caciques y grandes empresarios. Pero esta vez, la sistemática violencia represora del Estado ha generado una respuesta cada vez más intrépida del pueblo. El movimiento ha parado el funcionamiento normal del gobierno, las sedes del Poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial del Estado están "tomadas" y el gobernador despacha desde unos cuartos de hotel. No hay policía en las calles durante el día, y la gente se organiza para poner otro "orden", utilizando silbatos y movilizando a sus propias fuerzas para parar delincuentes. Ante las "operaciones de limpieza" de los "escuadrones de la muerte" oficiales que salen a aterrorizar de noche, obreros y otros de las colonias populares construyen barricadas ardientes que les cierran el paso y resguardan los campamentos. Amas de casa llevan comida, atole y café a los plantones y campamentos, campesinos y profesores jubilados traen leña, verdura y otros víveres. La voz del pueblo sale por algunas ondas radiales y maestros, jóvenes proletarios y estudiantes pasan la noche cuidando las antenas transmisoras. En las calles de la capital, se saborea una "probadita" de un nuevo poder en ciernes que se genera en medio de la tormenta. Cientos de miles han celebrado 5 "megamarchas", con cada vez más participación de contingentes del campo y las colonias. La gente ha cerrado carreteras y estaciones de autobuses foráneos y mantiene el plantón en el Zócalo de la capital, mientras se multiplican las protestas y las asambleas populares que en algunas regiones luchan por destituir presidentes municipales impuestos y odiados.
LOS OPRIMIDOS OPINAN EN LOS MEDIOS
Mientras Ruiz habla de "tolerancia" y "libre expresión", mandó destruir primero "Radio Plantón" (de los maestros huelguistas), y luego Radio Universidad (que transmitió la verdad sobre el movimiento y abrió sus micrófonos a la gente.) Hartas de tanta mentira oficial, miles de mujeres tomaron las instalaciones de la Corporación Oaxaqueña de Radio y Televisión (Canal 9), porque "sabemos que a través de este medio controlan y desinforman al pueblo y jamás le van a dar la voz para hablar de la verdad en que vivimos". Abrieron los micrófonos al pueblo y durante varias semanas el monopolio burgués de los medios fue desafiado por una estación donde la gente denunciaba, debatía e informaba sobre las acciones del movimiento y los ataques y maniobras de la policía. El 20 de agosto, policías vestidos de civil destruyeron la antena transmisora de esta estación, la dejaron fuera de servicio, hirieron de bala a un maestro y desaparecieron a otros tres, otra vez tratando de silenciar al movimiento. La gente se movilizó rápidamente, tomaron 12 estaciones de radio (casi todas las que hay en la ciudad), y comenzaron a transmitir ya no sólo a la ciudad, sino hasta pueblos lejanos. Vino luego otro ataque policiaco, en que asesinaron al arquitecto Lorenzo San Pablo (politécnico y originario de Yolomecatl, de la Región Mixteca) y detuvieron y torturaron a por lo menos dos maestros. Lorenzo fue uno de muchos que acudieron a defender la "radio popular", y con su heroica resistencia repelieron la embestida. La gente mantuvo las estaciones, donde volvió a transmitir el siguiente día. Hasta ahora siguen transmitiendo en 2 estaciones.
LAS FUENTES DE LA REBELION
¿De dónde surge tanta ira y tanto heroísmo? ¿Qué hay en el fondo de esta lucha? Como estado mayoritariamente indígena, Oaxaca ha sido mantenido largo tiempo como una región atrasada económicamente, con superexplotación semifeudal despiadada de los campesinos indígenas. La ideología y política oficial promueven la discriminación sistemática y el racismo contra los pueblos indígenas, hasta el grado que los oaxaqueños son tratados con desprecio en la sociedad mexicana. En años recientes, los cambios en el mundo trajeron una "modernización imperialista" a México, y en Oaxaca, el gran capital extranjero y nacional ha invertido en maquiladoras, grandes comercios, explotación forestal y otros "proyectos" para apoderarse de recursos naturales y explotar a la gente. El TLC y el Plan Puebla Panamá (PPP) son acuerdos que sirven a esta expansión capitalista. Tanto las grandes empresas imperialistas como los mismos términos del TLC y los proyectos del PPP, arruinan a los campesinos, artesanos y pequeños comerciantes en campo y ciudad, mientras el gobierno quita fondos para la educación, la salud, y los programas y servicios se deterioran si no desaparecen. Todos estos cambios han llevado al despojo de las comunidades indígenas, largas jornadas de trabajo a salarios bajísimos en las maquilas y los grandes centros comerciales de la capital, marea alta de migración forzada hacia Estados Unidos, el DF y nuevos campos agrícolas en el norte del país, la construcción de carreteras y puertos en el Istmo de Tehuantepec que además de extender el despojo de tierras y la destrucción del medio ambiente, dan mayor control de recursos y territorio nacional a EU. La rebelión de la gente surge de todo esto.
Se reflejan también todos estos cambios en una profunda crisis de la vieja estructura de poder caciquil priísta. En el gobierno anterior de Murat, se promulgó una nueva Ley Indígena para tratar de cerrarle el paso a la creciente lucha indígena, pero los hechos han demostrado que los supuestos derechos de los pueblos indígenas quedan en el papel mientras la opresión se intensifica. Las cárceles están llenas de inocentes que ni siquiera tuvieron oportunidad de defenderse en su propio idioma, como supuestamente es su derecho, mientras grupos paramilitares asesinan a la gente para defender el monopolio de poder de los terratenientes y determinados grupos de grandes capitalistas. Hay fuertes pugnas entre estas mismas clases dominantes, y se reflejan en escisiones en la cúpula del PRI, como se vio en la elección para gobernador. Hubo acusaciones de fraude, el grupo de Ulises Ruiz Ortiz (URO) se impuso, y siguió atacando a sus contrincantes, en particular al periódico Noticias que apoyó a la oposición (y apoya al actual movimiento). Los ex-gobernadores priístas Heladio Ramírez López y Diódoro Carrasco han tenido pugnas y enfrentamientos con Ulises Ruiz, y estas escisiones alientan a que desde abajo las clases oprimidas se atrevan a levantarse. Estos grupos poderosos "opositores" a su vez buscan utilizar la revuelta popular para retomar las riendas del poder en sus manos, y las fuerzas populares tienen que luchar duro para no caer en su trampa.
ULISES ES LA CARA DEL SISTEMA
Ulises Ruíz no es una anomalía en este país, es parte integral del estado que defiende este sistema capitalista y semifeudal. Sus crímenes y corrupción son del mismo costal que los crímenes y la corrupción del estado nacional que avaló la criminal negligencia de la empresa que condenó a la muerte a los mineros de Pasta de Conchos, que mató a balazos a dos trabajadores en Sicartsa, que violó a las mujeres, encarceló a más de 200 y asesinó a dos en su venganza contra el heroico pueblo de Atenco (con la participación de los tres partidos electorales) y que impone ahora con tanquetas la reaccionaria administración de Calderón, con la determinación de lanzar más ataques al pueblo en interés de los imperialistas, grandes capitalistas y terratenientes.
Si URO todavía no ha caído ante la amplísima movilización y el repudio popular, se debe a que el gobierno federal lo ha impedido por dos razones: busca una alianza con el PRI para afianzar su proyecto reaccionario y teme que si el pueblo logra quitar una "cabeza" del sistema con su lucha independiente, el ejemplo puede propagarse. Lidian con el repudio y encono popular por el fraude en las elecciones presidenciales y el movimiento encabezado por Andrés Manuel López Obrador, que apunta a formar una suerte de "gobierno alternativo". AMLO se deslindó del movimiento en Oaxaca, y hasta ahora la APPO se ha mantenido independiente del PRD. Pero el ejemplo de Oaxaca podría reforzar la lucha contra el régimen a nivel nacional y su nueva cabecilla, Felipe Calderón, y hasta podría contribuir a desencadenar la ira de millones contra los cimientos del Poder.
LA LUCHA POLITICA INDEPENDIENTE DEL PUEBLO EN OAXACA DA NUEVA ESPERANZA A TODOS
Existe el peligro real de una represión mayor al movimiento. A finales de agosto, Abascal (Secretario de Gobernación) abrió diálogo con la APPO, a la vez que hay informes que han mandado tropas de las FFAA desde Veracruz a Oaxaca. Antes de comenzar las negociaciones con la APPO, Abascal consultó con los "señores" políticos directamente interesados (Murat, Ruiz, Gabino Cue, Elba Esther Gordillo, y Heladio Ramírez). El presidente Fox y el virtual "presidente electo" Calderón (y sus asesores estadounidenses) tratan de manejar esta crisis para fortalecer sus alianzas políticas a nivel nacional, para fortalecer el control de su grupo del Estado nacional, y la capacidad de ese Estado para garantizar la "gobernabilidad" para los grandes capitales imperialistas y nacionales. Sin embargo, la crisis política en los dos niveles pone al actual régimen y su sucesor escogido en grandes aprietos.
La lucha política independiente del pueblo oaxaqueño es la esperanza del pueblo en toda la República: nos muestra la gran fuerza y creatividad de las masas populares en lucha, apoyándose en sus propias fuerzas, sin subordinarse a ningún partido electoral de las clases dominantes. Está abriendo la puerta a la lucha por un nuevo futuro en Oaxaca y todo el país, y hace eco a nivel internacional. En los intereses de los obreros, campesinos y clases medias, es imprescindible defender y popularizar la lucha del pueblo oaxaqueño en todo el país, y que con ese apoyo, la APPO se mantenga firme en la lucha por tumbar a Ulises Ruíz y las demás demandas. Exijamos todos:
1. Que caiga Ulises Ruiz como gobernador
2. Alto a la represión
3. Libertad a los presos políticos
4. Castigo máximo a Ulises Ruiz y demás funcionarios y policías asesinos
5. Aumento salarial y rezonificación para los maestros oaxaqueños.
La APPO ha comenzado a difundir la lucha y comienzan a movilizarse otras fuerzas en su defensa. Hay que continuar contribuyendo a que se popularice la lucha por todo México, a fin de fortalecer el apoyo a esta causa justa y también alentar que otros sigan su ejemplo y el pueblo se ponga de pie en todas partes. Lograr la caída del gobernador representará un gran golpe contra el sistema reaccionario, y una gran victoria del pueblo. Cada vez más voces están afirmando con toda razón que esta lucha debe ser un primer gran paso en luchar por arrancar todas las estructuras de opresión y explotación de los pueblos indígenas, de las mujeres y de los obreros, campesinos y clases medias en general. En este contexto, iniciativas por definir cuáles transformaciones hacen falta son oportunas y bienvenidas. Por ejemplo, la APPO ha llamado a "un nuevo constituyente y una nueva constitución democrática y popular de Oaxaca". Es importantísimo que la gente analice las raíces de la represión, el despotismo, y la miseria en que vive la gran mayoría, que identifique los cambios que podrían poner fin a los abusos y el sufrimiento, que podrían realmente liberar a la gente y con ese entendimiento, buscar cómo luchar para lograr esos cambios.
A nuestro juicio, algunos cambios mínimos e indispensables son:
1. Una república popular en todo México, un nuevo estado (no otra reforma del actual estado), que sería el poder de las clases populares y eliminaría el poder de los terratenientes y grandes capitalistas.
2. La confiscación de la propiedad de las grandes empresas monopólicas (fábricas, bancos, tiendas, etc.) y su conversión en propiedad de todo el pueblo (a través del nuevo estado). Desconocer la deuda externa, el TLC, el ASPAN y demás acuerdos internacionales desiguales.
3. La tierra para quien la trabaja. Confiscar la tierra de los terratenientes y repartirla entre los campesinos.
4. Igualdad y autonomía regional para los pueblos indígenas.
5. Igualdad para la mujer.
Para que tengan efecto estos y otros cambios necesarios, habrá que eliminar el poder económico y político que rige la sociedad actualmente. Pensamos que estos cambios son fundamentales para una revolución de nueva democracia que libere al pueblo y establezca una nueva sociedad donde la gente tendría el derecho y los medios para seguir transformando la sociedad, construyendo el socialismo en México apuntando a lograr el comunismo en el mundo entero, acabando por fin con todas las formas de opresión y todos los vestigios de la explotación. Queremos debatir estos y otros problemas y propuestas con todos, a la vez que nos movilicemos todos y nos unamos en defensa de la rebelión popular en Oaxaca.
¡VIVA LA HEROICA REBELION DEL PUEBLO EN OAXACA!
¡QUE CAIGA ULISES RUIZ COMO GOBERNADOR!
¡QUE LA LUCHA POLITICA INDEPENDIENTE DEL PUEBLO ABRA UNA NUEVA AURORA!
Movimiento Popular Revolucionario
